A estas alturas de la Navidad, hemos visitado Belenes, nos conocemos la iluminación navideña de toda la comarca, hemos escuchado villancicos, incluso hemos coincidido con Papá Noel en más de una ocasión.
Y faltando aún diez de días de “Dulce Navidad” parece que se nos acaban las ideas para que nuestros “peques” se diviertan y para que aprovechemos al máximo estos días de vacaciones.
Pero aquí está QdOcio, para proponeros planes y para que nunca se os acaben las ideas para disfrutar de tu tiempo libre en familia.
Nuestros “locos bajitos” no nos lo ponen nada fácil algunas veces, ya no nos sirve con llevarlos al cine o a la Pista de Patinaje de la Plaza Mayor, quieren más… a todas horas diversión.
Desde primera hora de la mañana exigen actividad.
Y como no queremos que muráis en el intento y que la Navidad siga con su paz y armonía...
Ahí van unas cuantas ideas originales para hacer en familia estos días.
1. Museo de las Ciencias de Castilla La Mancha en Cuenca
El saber no ocupa lugar, y en vacaciones podemos sacar un ratito para aumentar nuestros conocimientos mientras disfrutamos con los más peques.
Una visita muy recomendada es la que podemos hacer al Museo de las Ciencias de Castilla La Mancha en Cuenca.
Un viaje al planeta Tierra, a su pasado y a su futuro, y cuyo vehículo de conocimiento no será el arte, ni la música...sino la Ciencia.
Y el espacio estrella del Museo, el Planetario: una gran cúpula de cien metros de diámetro sirve de pantalla donde se proyectan más de 6000 estrellas, objetos celestes y planetas.
Una magnífica combinación audiovisual que nos permiten realizar incursiones en el universo.
Admirar las estrellas hasta parecer que las tocas con la mano. Intentar por un momento comprender la inmensidad del universo.
2. Casas Rurales
El turismo rural está muy de moda, y más en nuestra región.
No en vano somos una de las regiones con más oferta de turismo de interior. Paisajes mágicos y parajes que no podemos dejar de visitar.
Una escapada perfecta para disfrutar con los más pequeños de la naturaleza y todo lo que nos aporta.
Conocer de cerca y junto a ellos las maravillas paisajísticas de nuestra tierra y disfrutar de nuestro tiempo libre con tranquilidad, no tiene precio.
Si además lo hacemos en una casa rural de las muchas que tenemos en nuestra zona, la escapada además de encanto, será ideal.
Una manera especial y única de acabar el año, tomando las uvas al abrigo de alguno de los parques naturales que recorren nuestra región, como Cabañeros, o disfrutando de un entorno único como el Valle de la Alcarria.
¿Y que me decís de una casita rural a orillas del Río Júcar?
Pues a qué estáis esperando, una Nochevieja diferente, donde no son necesarios trajes de gala ni lentejuelas, solo el aire puro, la naturaleza y todas las personas de las que desees rodearte.
Además es la ocasión perfecta para que los más pequeños retocen, salten y se diviertan libre de los peligros de la gran ciudad
3. Visita al Zoo
¿Una de animales? ¿Por qué no? En nuestra región tenemos la suerte de contar con dos pequeños espacios para la conservación de la fauna y la flora.
A los niños, y a los no tan niños nos encantan los animales, y cuanto más exóticos y raros mejor.
En la provincia de Toledo, en Santo Domingo se ubica el Zoo Koki, con una pequeña pero muy seleccionada colección de animales.
Un zoo familiar y cercano donde podremos dar de comer, tocar y ver de cerca numerosas especies.
Un lugar especial alejado del ruido y la contaminación.
Es uno de los únicos parques zoológicos que existen por iniciativa privada y lo que empezó siendo el sueño de tres hermanos, de origen extremeño, se ha acabado convirtiendo en una hermosa realidad.
Una realidad con la que nos acercan a una muestra de especies de los distintos continentes.
El Zoo de Guadalajara es otra oportunidad de acercarnos al maravilloso mundo de los animales.
Inaugurado en 1985, se mantiene desde entonces en continua expansión.
Cuenta con animales de los cinco continentes, aunque se ha especializado en la fauna europea.
Podemos disfrutar con especies de fauna silvestre y doméstica.
Osos, linces, jabalíes, lobos, ciervos, gamos, macacos, ponis, ovejas, son solo algunos de los habitantes de este zoo.
Se encuentra situado en el Parque del Río, junto al cauce del Henares.
Disfruta de una gran arboleda, que se agradece en época estival, lo que lo convierte en un oasis de aire puro para la ciudad de Guadalajara.
Te invita a llegar sin prisas y a quedarte a disfrutar de las maravillas de la naturaleza.
4. Museo de coches de Cine
En la localidad toledana de Yuncos se ubica un museo de lo más peculiar. ¿Te apetece ver una colección de coches de película?
No es que estemos hablando de grandes coches o de carísimos vehículos de exclusivas marcas, que también, es que estas bellezas sobre ruedas han sido protagonistas de películas y series en nuestro país.
Allí están los coches de la película de Pedro Almodóvar, “Volver” o del “El espinazo del diablo” de Guillermo del Toro.
También podemos disfrutar de los de famosas series de televisión como “El Tiempo entre costuras” o “Amar en tiempos revueltos”.
Es una ocasión estupenda para disfrutar con los más pequeños no solo de esos coches que hemos visto por la televisión, que algunos de ellos cuentan aun con los disparos de las escenas más espectaculares, si no de admirar estas bellezas que recorrieron las calles en épocas pasadas.
Un lugar de ensueño para los amantes del cine a veinte minutos de la capital por la carretera A-4 y que las productoras conocen como la colección de Vicente Pavia
Él es el director del museo y ha conseguido una colección tan exclusiva y versátil que es solicitada para todo tipo de producciones de cine, televisión y publicidad.
Una idea estupenda para pasar el día, grandes estrellas del cine y la televisión ante nosotros, ¿si tenemos suerte nos darán un autógrafo?
5. Museo del Niño
En la capital albaceteña, más concretamente en la calle Amparo, nº 14 y ubicado en un colegio encontramos un museo muy especial.
Como “entre niños anda el juego” te invito al Museo de Niño.
Fue creado por el maestro Juan Peralta en 1987 y es un museo dedicado en exclusiva a los niños y a la infancia en todos sus aspectos.
En numerosas salas, a lo largo del edificio, nos encontramos desde representaciones de aulas de décadas pasadas, a vitrinas con con utensilios propios del cuidado de los niños, cochecitos tronas, etc.
También cuentan con una sala dedicada a los juguetes y su evolución a lo largo de la historia.
Una sala que no podemos dejar de visitar dentro del museo es la dedicada a la Infancia Robada, a todos los niños, a lo largo del mundo, que no pueden vivir como lo que son, niños.
Niños soldados y niños trabajadores como esclavos, a los que les son arrebatados esos años a los que todo niño tiene derecho.
Sin duda, algo sobre lo que recapacitar.
Unos planes "a prueba de niños" con los que entretener y entretenerse, aunque no solo en Navidad.
Cualquier época del año es buena para escaparse.
Tomad nota y pasadlo en grande estas Navidades.
