Enero llegó, pero no llegó solo, vino cargado de buenos propósitos, rebajas y la temida cuesta de enero. ¿Necesitas ayuda para sobrevivir a ella? QdOcio te da cinco consejos.
Si, la “cuesta de enero", un eufemismo con el que cada año nos bombardean, haciéndonos creer que superar el primer mes del año fuera cosa fácil.
Esta “cuesta” necesita, moral, reaños, cuajo, y sherpas, como si lo que fueras a escalar fuera el K2, lo del Everest esta muy trillado ya.
Has superado las Navidades y has conseguido no sucumbir a la tentación de las rebajas. Enhorabuena.
No hay dos sin tres, ahora toca la "cuesta de enero"
Los consejos son siempre útiles y es una muy buena idea seguirlos.
Has puesto en práctica todos los tips que circulan por Internet sobre cómo ahorrar... y no hay manera.
Estamos a mediados de mes y lo más parecido a una moneda que te queda en el bolsillo, es el llavero con el que coges el carrito del supermercado.
Supermercado que, inevitablemente, tienes que visitar antes de que acabe la semana, tienes la fea costumbre de comer todos los días cinco veces.
Porque eso es lo que te han aconsejado para estar sano, y como estamos en enero, hay que esforzarse con lo de los buenos propósitos de los que ya hablamos.
Claro que como no tomes cartas en el asunto, la dieta de las cinco comidas puede convertirse en la del ayuno intermitente.
Pero tus problemas no acaban ahí, la vuelta al cole tras las vacaciones de Navidad, no tenía ningún gasto asociado, o eso pensabas tu.
Uno de tus “pequeños” ha llegado de clase con un solo tirante sano en la mochila y el otro, que está aprendiendo a montar en patinete, ha decidido que las zapatillas son unas buenas “pastillas de freno”.
Esto es un no parar...
Así que, recapitulando...
Tienes que renovar una mochila, sustituir unas zapatillas, hacer la compra y terminar el mes con un presupuesto manejable de “0” euros.
Ah claro, se me olvidaba, como el destino confabula contra ti, la factura del gas y de la luz también vienen este mes.
Creo que hace dos párrafos que ya te entraron ganas de salir de corriendo, a mi también. Pero recuerda, practicar running es saludable.
Pero que no cunda el pánico, o no mucho por lo menos.
Todo tiene solución, creo. Tienes dos opciones, o coges a tu familia y huyes del país…
O coges al toro por los cuernos y haces “números” muuuchos “números”.
Vamos que necesitas un master, ya no te digo de finanzas de Harvard, si no de Artes Mágicas en Hogwarts.
Manos a la obra... ahí van nuestros consejos.
1. La información es poder
Primero toma asiento y recaba toda la información que puedas
Busca todos los recibos escondidos, y posibles gastos del mes…
Es probable que cuando tomes conciencia de todo lo que tienes que pagar, el susto sea mayor que cuando la niña de El Exorcista bajó por la escalera.
No pasa nada, cuando tengas todos los datos, ordénalos por prioridad, es lo mas sensato.
Dinero no te queda, lo sabes, pero la sensatez tienes que sacarla de donde sea.
Con sencillos consejos, podrás ahorrar en energía y la factura que te llegará dentro de dos meses, no dará al traste con el presupuesto para viajar en Semana Santa.
Sí, este año se adelanta a finales de Marzo.
2. Olvida las delicattesen, este mes no toca
Comer, tenemos que comer, pero cuando vayas al “súper” utiliza la cabeza.
Este mes nada de solomillos, ni entrecot, ni postres “gourmet”.
Caldos y sopas, platos de legumbres y de cuchara, en general, y pechuguitas de pollo para la plancha.
No solo lo agradecerás al pasar por caja, sino que la bascula sentirá también el alivio.
Recuerda que la Navidad hizo estragos y estás en modo superar los excesos navideños, tema del que ya hablamos.
Ah, y con las frutas y verduras haz lo mismo, no es momento de dispendios en frutas tropicales.
Estás en La Mancha, así que fruta y verdura de temporada. Mucho más fresca y a mejor precio.
Los mangos y aguacates déjalos para cuando cobres la paga doble.
3. Negocia y renegocia
Para rizar el rizo, se unen a la fiesta la luz y el gas. Lo hecho, hecho está, esta Navidad se te ha disparado el gasto.
Y como de costumbre, y al contrario de lo que todos los años intentas, has acabado por regalar en exceso estas fiestas.
Todos en casa, alguna visita inesperada, y la iluminación navideña de tu fachada se podía ver con Google Earth…
Ahora solo queda pagar, pero también para esto hay solución, puedes hablar con tu compañía de luz y gas, porque te dan la posibilidad de reestructurar el pago en varias cuotas.
Es un servicio que ofrecen y del que nunca nos aprovechamos, y sabes que te digo, que dadas las circunstancias cualquier ayuda es poca.
Baja el termostato de la calefacción, no tiene mucho sentido tener la calefacción puesta y tener que estar en manga corta, ¿recuerdas lo de la sensatez?
Pero ojo, no te excedas con el móvil, porque te recuerdo que entre felicitaciones navideñas, mensajitos y 1001 whatsapps que has mandado sin mirar, ni cómo ni cuándo, los megas y los minutos de tu tarifa...
Han desaparecido como por arte de magia, ¿Se los habrán llevado los Reyes Magos?
4. Reciclarse o morir
¿Recuerdas las zapatillas y la mochila? Pues es momento de echar mano de tus conocimientos de costura.
Sabes que son básicos y rudimentarios, pero dadas las circunstancias no hay otra opción.
Y si es necesario, y no hay otra alternativa mejor, echa mano de la cinta aislante.
Después de un exhaustivo análisis, llegas a la conclusión y haciendo gala de tus conocimientos de costura adquiridos en un colegio de monjas, que lo mejor es un apaño.
Un apaño, para que aguante, por lo menos, hasta el día 2 de febrero.
Además, el diseño del disfraz del último festival de Navidad de tu hijo, lo hiciste bastante bien, ¿verdad?
¿Qué puede salir mal?
5. Reinterpreta tu vida social
Como no hay quinto malo, lo mejor que puedes hacer es reírte de tus problemas y de tu economía en estado critico…. pero no te preocupes al mal tiempo buena cara.
Aunque tu vida social pueda sentirse un poco perjudicada, siempre puedes echar mano de tu agenda de contactos, a ver si algún alma caritativa y, con mas recursos, te invita a unas cañas.
Y si todos los conocidos sufren las inclemencias de este mes igual que tu, las cervezas y las tapitas las puedes organizar en casa, el “super” de la esquina tiene grandes ofertas.
6. Encomiéndate a...
Si a todos estos “maravillosos” frentes le sumas que tienes un negocio propio y perteneces al “selecto” y “afortunado” grupo de los autónomos, no tienes escapatoria.
El día 30 se acerca, inexorablemente,y si hay alguien que no perdona esa es….
”Con la Seguridad Social hemos topado, Sancho” que diría algún hidalgo.
En este punto te podemos ayudar bien poco, por eso te aconsejamos que aquí solo te queda encomendarte a lo que, buenamente, se te ocurra.
Y para hacer tiempo mientras la ayuda divina viene, nada mejor que recurrir a los consejos sobre practicar yoga que ya te contamos. Te vendrán bien.
Enfrentarse a la cuesta de enero es duro, lo sé.
Ríete tú de los que están participando en el Paris-Dakar, que nos cambien la economía familiar de un mes de enero, por un todoterreno por el desierto...
Pero al final, después de mucho sudar, consigues, entre restricciones, sacrificios y, algún que otro truco de magia, llegar al ansiado 1 de febrero.
Enhorabuena, has conseguido superar uno de los peores meses del año, y te has prometido firmemente que el año que viene será distinto..
Pero ¿te cuento un secreto? Dará igual lo que propongas a 360 días vista…. habrás olvidado todas tus buenas intenciones.
El ser humano es el único “animal” que siempre tropieza en la misma piedra.
Pero, sin querer desanimar, QdOcio os recuerda que no hay tregua, este mes de febrero nos trae otra sorpresa...el Carnaval